El Electrofitness es muy seguro; sin embargo no debe practicarse nunca en los siguientes casos:
- Pacientes cardíacos con marcapasos.
- Mujeres con embarazo avanzado.
- Pacientes con placas quirúrgicas o tornillos de metal (salvo que sean de titanio).
- Pacientes con enfermedades neurológicas (epilepsia, enfermedad de Parkinson o similares).
Igualmente, es muy importante consultar con su médico antes de practicarlo en los siguientes casos:
- Hernias inguinales o abdominales.
- Arterioesclerosis avanzada.
- Problemas graves de circulación sanguínea (flebitis, tromboflebitis o várices muy avanzadas).
- Personas que sufran una discapacidad física o neurológica que no les permita controlar voluntariamente su cuerpo.
- Insuficiencia renal y/o hepática.
- Diabetes, sin control médico.
- Enfermedades cardiacas graves.
- Fiebre o cualquier proceso infeccioso (mientras dure).
- Falta de sensibilidad en la piel.
- En general, enfermedades graves y/o crónicas.